Estamos ya casi al final de las vacaciones de verano, por lo que como cada año hemos tenido cientos de visitantes a la ciudad que vienen a ver a sus familias, algunos vienen de otras ciudades, algunos vienen de otros estados, y otros muchos, vienen de otros países, etc.
Sin embargo, hay un comentario que se repite una y otra vez en el que la mayoría de estos visitantes coinciden: ¿Qué está pasando con Delicias?
Una y otra vez oímos, leemos, el mismo comentario con diferentes palabras: “nunca había visto la ciudad tan descuidada, nunca había visto las calles tan mal, nunca había visto la ciudad tan sucia, nunca había visto los parques sin mantenimiento, las banquetas rotas y peligrosas, las paredes sin pintar, etc.”.
¿Será que para los que llevamos años aquí, se normalizó la indiferencia o aprendimos a vivir en una infraestructura en decadencia?
A nuestra redacción, llegan constantemente decenas de quejas por estos mismos motivos, pero hemos notado un aumento significativo ahora en el verano, y al contactar con estas personas, nos confirman que en su mayoría son gente que viene de regreso a su ciudad y se encuentra con estas condiciones.
Y no es para exagerar, la realidad es que la mayoría de la infraestructura pública se encuentra abandonada desde hace más de una década. Calles, plazas, parques, canales, puentes, el urbanismo en si, todos ellos sufren una continua carrera por cual se deteriora más.
La infraestructura es el pilar de la civilización moderna. Es el entorno que construimos a nuestro alrededor y es responsables de la provisión de servicios públicos de calidad, una movilidad urbana eficiente, la integración regional, la reducción de las desigualdades sociales o la comercialización exitosa de productos. En Delicias el abandono de las infraestructuras públicas de transporte, electricidad, telecomunicaciones o agua y saneamiento limitan las aspiraciones económicas de la mayoría y esto afecta el bienestar de miles de ciudadanos.
A ver, remontémonos a 10 años antes, Delicias llevaba ventaja sobre Meoqui, su municipio más cercano, pero ahora con la inversión que ha tenido, pasó de ser un pueblito congelado en el tiempo por 300 años a llegar a competir con Delicias. ¿Qué pasó? ¿A que se debe ese abandono? ¿antipatía de los ciudadanos? ¿una normalización de la situación? ¿política, mafias de poder?.
Nos encantaría que esto fuera una situación nueva, que se presenta desde hace algunos meses, sin embargo la realidad es otra, este deterioro de la ciudad no es una cosa qué pasa de un día para otro, es algo casi sistemático, es un deterioro constante, y no es muy difícil encontrar el origen, es algo que coincide con la poca rendición de cuentas que han tenido que hacer los gobernantes actuales y anteriores, esto podría ser debido a la poca alternancia que hemos tenido en el municipio en los últimos 10 años lo que provoca que las cosas cada vez están peor y por lo que se ve no parece que vaya a ver soluciones pronto.
