El Gobierno de Chihuahua decidió ocultar el gasto de compra, elaboración, impresión y distribución de los más de 700 mil cuadernillos entregados a estudiantes de educación básica como parte de la estrategia para sustituir los libros de texto gratuitos hechos por la administración federal.
La Secretaría de Educación y Deporte (SEyD), instancia encargada de la elaboración de estos materiales, optó por reservar por un año los contratos relacionados con los cuadernillos, como se aprecia en una respuesta a la solicitud de información de folio 080142323000268.
La dependencia estatal argumentó que los cuadernillos, también conocidos como material de apoyo, estaban en un proceso todavía no finalizado de diseño, adjudicación, contratación, elaboración y entrega.
“… no nos es posible entregar aún la información requerida por el solicitante ya que la mayoría de la información en cuanto a la cantidad de alumnos, que es lo que va a determinar la cantidad de material a elaborarse, se pudo conocer hasta el inicio de clases, cantidades que a la fecha están en constante cambio”, argumentó Ana Lilia Baca Prado, directora de Administración de la SEyD en el oficio de respuesta a la solicitud.
La respuesta de la funcionaria, fechada el 25 de septiembre pasado, dice que el 11 de agosto inició una primera etapa para la dotación del material de apoyo; a más de seis semanas de esa fecha, continuó la SEyD, no se ha terminado el proceso.
“Hacer entrega de la información implicaría que esta tuviera carencia de certeza y definitividad, puesto que no se han tomado determinaciones finales sobre el tema por lo que es materia de un proceso deliberativo (…) se trata de información reservada la cual es materia de un proceso deliberativo; es decir, aquella que con su difusión pueda llegar a interrumpir, menoscabar o inhibir el diseño, negociación e implementación del proyecto en materia de proceso”, continuó la respuesta de la dependencia.
Lo argumentado por la directora de Administración de la SEyD contrasta con las declaraciones que hizo a medios de comunicación la titular de la dependencia Sandra Elena Gutiérrez Fierro, quien el pasado 2 de octubre afirmó que por cada estudiante se habrían erogado entre 55 y 60 pesos y que se entregarían a al menos 725 mil personas entre alumnos y docentes.
Sin bien la directora de Administración propuso una reserva de un año a la información, el plazo que fue ratificado por el Comité de Transparencia de la secretaría.
La petición, ingresada a través de la Plataforma Nacional de Transparencia, solicitó copia simple de contratos para la compra, impresión, elaboración y distribución de los cuadernillos entregados a alumnos de primaria.
Opacidad en todo el Estado
El responsable de las finanzas del Estado, José de Jesús Granillo, secretario de Hacienda, también dijo desconocer cuánto del presupuesto público 2023 se había destinado a la elaboración de los cuadernillos, aun cuando hubo que reasignar recursos para afrontar el gasto.
“Todavía está en proceso el trámite de contratación, hasta que no concluya el trámite de contratación sabremos cuánto es lo que habrá costado. No lo tenemos nosotros, es algo que está preparando la Secretaría de Educación, nosotros lo único que estamos haciendo es garantizando que pudiera haber recursos para poder cubrir esa eventualidad”, dijo Granillo el 27 de septiembre.
Ante la opacidad, pues no ha habido alguna autoridad del Ejecutivo que de manera pública informe sobre qué empresas fueron contratadas para los cuadernillos, ni sobre los procesos de adjudicación o gasto, la bancada de Morena presentó ante la Auditoría Superior del Estado una denuncia de hechos.
El diputado Benjamín Carrera, de Morena, ha acusado que al menos 36.8 millones de pesos fueron destinados a los cuadernillos; la estimación la obtuvo de la Secretaría General de Gobierno, que en respuesta a cuestionamientos del legislador, dijo que la Secretaría de Hacienda había autorizado movimientos presupuestales por esa cantidad para “la impresión del material de apoyo”.
Los cuadernillos fueron elaborados y distribuidos en planteles de educación básica en el estado luego de que el pasado 11 de agosto el ministro Luis María Aguilar ordenó suspender la distribución de libros de texto gratuitos de la SEP en Chihuahua, al admitir una controversia constitucional promovida ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por el gobierno de María Eugenio Campos Galván.
Por esa suspensión, las clases en las escuelas públicas de Chihuahua iniciaron sin libros de texto.
Sin embargo, la semana pasada la SCJN dejó sin efectos el recurso que bloqueó la entrega de los materiales educativos al inicio del ciclo escolar en Chihuahua, por lo que a partir de este lunes comienza su entrega a los alumnos de educación básica.
Hasta ahora no se ha informado qué uso tendrán los más de 700 mil cuadernillos elaborados por la administración estatal ni el gasto realizado para diseño, impresión y distribución.