De acuerdo a la percepción de usuarios del transporte urbano en Cuauhtémoc, existen diversas fallas en la prestación del citado servicio que afecta a familias que habitan en colonias populares de la ciudad, señalando que el costo del pasaje que es de 8 pesos, es muy alto para las condiciones en las que operan las unidades, las cuales carecen en su totalidad de los necesario para la atención a personas con discapacidad.
Al cuestionar a un total de 20 personas que utilizan el servicio colectivo de transporte, el 90 por ciento coincidió en que la mayoría de las unidades se encuentra en malas condiciones, además de denunciar mal trato por parte de los choferes, quienes incluso, fueron señalados de poner en riesgo la integridad de los pasajeros por el manejo inadecuado de las unidades.
Destaca que los usuarios indicaron que ningún camión de los 50 que circulan en 12 ruta establecidas en la ciudad, están adaptados para prestar el servicio a personas con discapacidad, quienes sufren las consecuencias de ello al verse obligados a tomar el camión.
Otras de las quejas, es el costo elevado del pasaje, ya que afirman que la mala distribución de algunas rutas, obliga a los ciudadanos a tomar hasta tres unidades para trasladarse a sus trabajos o alguna dependencia en especial, para lo cual deben de desembolsar hasta 40 pesos diarios.
Por si esto fuera poco, los inconformes manifestaron que el tiempo de espera es demasiado largo, al prologarse hasta 45 minutos para abordar el transporte colectivo, lo que afecta las actividades de los usuarios.
De acuerdo al área de inspección de Trasporte de Gobierno del Estado ubicada en el municipio de Cuauhtémoc, el servicio de transporte urbano opera con algunas deficiencias por diferentes factores, entre estos la disminución del pasaje por la serie de restricciones establecidas desde el comienzo de la pandemia del Coronavirus, lo que motivó que el número de unidades se redujera hasta en 50 por ciento.
Otro de los factores que se suma a la baja demanda, es la posibilidad que tienen las familias de obtener un vehículo “chueco” a precio bajo, lo que ha obligado a la restructuración de rutas para evitar el uso de más unidades.
Asimismo, ante la creación de nuevos fraccionamientos el recorrido de las unidades es mayor, pese a ello, hay zonas en las que un bajo porcentaje hace uso del transporte colectivo.
En contraparte, operadores de unidades del transporte urbano atraviesan por una serie de complicaciones para desempeñar su labor, al existir diversos conflictos generados por los mismos usuarios, señalando que su actividad es incomprendida a pesar de los esfuerzos que se realizan por servir a la comunidad.
Los choferes trabajan u total de 15 horas diarias con un día para su descanso, además de contar con un mínimo de tiempo para ingerir sus alimentos, lo cual lo hacen mientras desarrollan su actividad, además de carecer de sanitarios, condiciones que en ocasiones pone en riesgo su salud.