Los cultivos desmedidos de nogal en las regiones de Jiménez y Camargo son los responsables de que estas zonas se hayan quedado sin agua superficial, mientras que en la actualidad “están agotando el líquido del subsuelo”, dijo ayer Víctor Ortiz, exfuncionario de la Junta Central de Agua y Saneamiento (JCAS) e integrante de la Fundación para la Conservación del Río Conchos.
“Es lo que pasará en Chihuahua con el agua de El Sauz si las autoridades no toman medidas inmediatas para frenar la explotación”, advirtió el experto en hidrología.
El activista, quien por años se ha especializado en el tema del aprovechamiento del agua, recalcó que hace décadas se importó la siembra del nogal a Chihuahua para regiones en las que se podía soportar el alto consumo para el riego, pero debido a que la siembra ha desplazado a otras que son menos rentables, la producción de nuez ahora pone en riesgo el abastecimiento de agua para la ciudad.
Explicó que en la región de Camargo y Jiménez se ha utilizado los métodos de riego más atrasados, en los que se inundan las huertas, generando un desperdicio de millones de litros, por lo que ahora no quedan reservas de agua superficiales y ya está haciendo crisis con la extracción de líquido del subsuelo.
Apuntó que es lamentable que los cultivos de nogal crezcan de manera desmedida, sin que las autoridades apliquen medidas. “Sí existen las concesiones para el uso de agua y hay algunas para cultivos de alto consumo, pero son unas en específico, y ahora usan las concesiones que se supone que también son para el uso de las ciudades”, dijo.
Añadió que por lo menos en el caso de las nogaleras localizadas en la región de El Sauz se están utilizando mejores métodos de riego, pero esto no será suficiente ante el crecimiento de las superficies cultivadas.
Agregó que para los productores de la nuez es muy rentable esta cosecha debido a que pagan centavos por el agua, pero si se les cobrara lo que realmente cuesta, ya no sería así. “Los dueños de las nogaleras no son intocables, sería tan sencillo como cerrar la llave del agua para que se frene la siembra desmedida”, concluyó.