Pocos días antes de la convocatoria nacional organizada por el INE, el exgobernador del Estado de Chihuahua, Fernando Baeza Meléndez, hizo un llamado a la sociedad en general a no participar en la revocación de mandato, ya que se trata, como dijo el:
“De un proceso plasmado de irregularidades y violaciones de Morena a la Constitución mexicana”.
Así, a través del exgobernador priista los militantes de Acción Nacional escondieron la cara para convocar a que NO participen en la Revocación de Mandato.
“Es incomprensible como el presidente promueve su propia revocación de mandato, lo que hace pensar que busca es ratificar su gestión”, expresó el priísta.
“Yo me sumo a las declaraciones del PAN de no participar en el ejercicio de revocación de mandato para no hacerle el caldo gordo a Morena”, exclamó el exmandatario.
El mismo que les cometió (al PAN) fraude electoral en 1986 (verano caliente), del que hasta en instancias internacionales se dolieron, acusándola de corrupto y de ser un gobernador espurio, y que como consecuencia de ese fraude electoral, el gobernador Francisco Barrio le dedico el decreto No. 603-97 II DP, publicado en el P.O.E con el No. 71 en 1997.09.03, mediante el cual adiciono al artículo 21 de la constitución de Chihuahua, la REVOCACIÓN de MANDATO en el estado, precisamente para que gobernadores como Fernando Baeza, “corruptos y espurios”, (así lo decía en aquellos años militantes de Acción Nacional) que llegaron al poder impopularmente por medio del fraude electoral, sus mandatos fueran revisados a mitad del sexenio.