• Por el contrario, se ha negado de manera sistemática a colaborar con el Gobierno Federal pese múltiples peticiones de la Comisión Nacional de Zonas Áridas, aclara el director regional Ricardo Villarreal Godínez
• Van 3 vuelos del King Air 350i de la Sedena, sin recursos humanos ni económicos del Gobierno de Chihuahua
El ingeniero Ricardo Villarreal Godínez, director regional de la Comisión Nacional de Zonas Áridas (Conaza), desmintió al ingeniero Mauro Parada Muñoz, secretario de Desarrollo Rural, quien afirmó en rueda de prensa que el Gobierno del Estado de Chihuahua está apoyando con recursos humanos y económicos en la aplicación del Programa de Estimulación de Lluvias.
El funcionario señaló que, por el contrario, el Gobierno del Estado se ha negado de manera sistemática a colaborar con el Gobierno federal en la aplicación del Programa, a pesar de la petición que le ha hecho la Conaza en múltiples ocasiones.
El director regional de la Conaza, dijo que el pasado 25 de julio, el delegado estatal de los programas para el Desarrollo, Juan Carlos Loera de la Rosa, también hizo un llamado a la gobernadora para que el Estado asumiera la renta de una aeronave y así adelantar el “bombardeo” de nubes como ya lo hacían otros estados, dado que el avión de Sedena estaba ocupado en otras entidades y tardaría un mes en llegar a la nuestra.
La mandataria respondió entonces, a través de los medios de comunicación, que el bombardeo de nubes era “una práctica que no tiene sustento científico”. “Ojalá y todo fuera contratar aviones y bombardear nubes”.
El 4 de agosto la mandataria ratificó su no apoyo al programa argumentando que podrían ocasionar inundaciones y demandas por los daños, explicó.
*Van 3 vuelos del King Air 350i *
El director regional de la Conaza aseguró que durante agosto han realizado tres aplicaciones del Programa de Estimulación de Lluvias en Chihuahua, a través de la aspersión de partículas de yoduro de plata en las nubes, sin ningún apoyo del Gobierno del Estado.
Detalló que las aplicaciones se hicieron en tres vuelos que dirigió personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en un avión tipo King Air 350i, desde el cual esparcieron la mezcla de los reactivos en las nubes que concentran mayores niveles de humedad.
En el vuelo del día 3 de agosto la estimulación se llevó a cabo en el sector norte del polígono, recorriendo los siguientes municipios: Satevó, San Francisco de Borja, Carichí, Cusihuiriachi y Guerrero. La nubosidad consistió básicamente en bancos de Nimbostratus y Stratus, con vientos dominantes de noroeste a sureste.
En el vuelo del día 10 de agosto la aplicación se llevó a cabo de sur a norte del polígono, recorriendo los siguientes municipios: Matamoros, Santa Bárbara, San Francisco del Oro, Huejotitán, Rosario, Satevó, San Francisco de Borja, Carichí y Cusihuiriachi, así como Guanaceví, Durango. La nubosidad consistió en bancos de Nimbostratus, Cumulonimbus y Stratus. Se presentó la necesidad de salir un poco del polígono ya que no había nubosidad y se buscó estimular las nubes que estaban por ingresar.
En el vuelo del día 11 de agosto la estimulación se llevó a cabo de sur a norte del polígono, recorriendo los siguientes municipios: Matamoros, Santa Bárbara, San Francisco del Oro, Huejotitán, El Tule, Balleza, Nonoava, Satevó, San Francisco de Borja, Carichí, Cusihuiriachi y Guerrero. La nubosidad consistió en bancos de Nimbostratus, Cumulonimbus y Stratus, con vientos predominantes del noroeste alsuroeste.
El ingeniero Villarreal Godínez consideró que la aplicación del Programa ha sido un éxito porque los pluviómetros de la Conaza registraron más de 30 milímetros de lluvia en cada una de las tres aplicaciones.
El funcionario confía en que pronto continúen los vuelos y aclara que las posibilidades dependen de que haya avión de la Sedena disponible y nubes suficientes para la aplicación del programa.
Precisó que Chihuahua está compartiendo el avión de la Sedena con Torreón, Coahuila y lamentó que el Gobierno del Estado no esté apoyando la aplicación del programa.
El director regional de la Conaza espera que entre agosto y septiembre puedan completar entre 15 y 20 vuelos para que haya suficiente lluvia que corra por los ríos Conchos, San Pedro y Florido, para que contribuyan a subir el nivel de las presas La Boquilla, Las Vírgenes, El Granero, Pico de Águila, Abraham González y San Gabriel.
